Caprichos cromáticos
La reinterpretación de la pintura como materia artística fundamenta el estímulo creativo de Arancha Goyeneche. Para ello utiliza materiales tradicionalmente ajenos a esta disciplina, sobre todo aquellos provenientes del mundo industrial, como vinilo adhesivo, pvc, fotografía, fluorescentes o proyecciones, entre otros. A pesar de que se cuestione el soporte pictórico, en todo su trabajo late una defensa íntima de la pintura, una dualidad entre tradición y modernidad que respeta en lo fundamental los postulados clásicos de la creación artística. En este sentido, la artista trata de mantener viva la búsqueda de los valores de la pintura tradicional de perspectiva, color, veladura, luz, volumen e ilusión de movimiento mediante la superposición sucesiva de capas de color junto con materiales de distinta naturaleza.
Una de las cualidades de la obra de Arancha Goyeneche es su carácter instalativo. En ocasiones, el muro se convierte en un gran lienzo blanco donde expande todo el material fragmentado, convirtiendo la practica pictórica en un trabajo casi escultórico, pleno de relieve y movimiento. De otro modo, el uso de luz cromática mediante fluorescentes provoca que los límites físicos de la obra sean aún más imprecisos, expandiendo también el color a través de la sala, los techos, el suelo para finalmente imponerse sobre el espectador. Por todo ello podríamos hablar más de espacio pictórico que superficie pictórica.
Además de estudiar el concepto y la práctica pictórica fuera de sus soportes tradicionales no hay que olvidar que el trabajo de Goyeneche está íntimamente unido al paisaje vivido como una experiencia vital, básica y necesaria. Su obra está traspasada por la inspiración paisajística, por una intervención de la naturaleza basada en la abstracción, moviéndose en el terreno de las sensaciones y las emociones, hasta construir una reinterpretación vitalista de la realidad llena de evocaciones y abierta a la interpretación del espectador. Esta obra surge a partir de la experiencia directa con la naturaleza, de sus ciclos vitales, de la observación de las pequeñas cosas que pasan inadvertidas y que son invisibles a nuestra forma actual de vida tal y como estamos acostumbrados en un mundo tan artificial y tecnológico.
Por todo ello el título de la muestra, Caprichos cromáticos, está cargado de sentido. La artista presenta en la galería Gema Llamazares una selección de trabajos realizados en los últimos años hasta la actualidad. Podremos ver la obra Sticked painting que comenzó a trabajar en 2012 y que todavía sigue en proceso de desarrollo. Se trata de una pieza cuyo origen se encuentra en el estudio de la azulejería mudéjar, concretamente la que se encuentra en la casa Pilatos en Sevilla. La artista no pretende hacer ninguna reproducción fiel del azulejado, de sus formas y geometría, ni tampoco utilizar la misma técnica cerámica con la han sido realizados. Lo que le interesa es construir e interpretar una visión contemporánea del conjunto, de las sensaciones que producen, y todo ello trasladarlo a un lenguaje plástico y coherente con su propia trayectoria artística.
En este sentido, el propio título, Sticked painting, alude a la técnica empleada. Se trata de pequeños recortes de vinilo autoadhesivo a modo de stickers o pegatinas de colores mates, brillantes o reflectantes pegados sobre una superficie de pvc de 10 x 10 cm. Con estos pequeños elementos, unidades o módulos, que obviamente tienen un paralelo con la fragmentación propia del alicatado, realiza distintas composiciones mediante paneles que adapta, según las necesidades, al espacio expositivo o, lo que es lo mismo, al espacio arquitectónico. En el presente caso presenta 6 paneles que forman un mural de 180 x 540 cm.
Muchas de estas unidades modulares, que ya de por sí son pequeñas obras pictóricas en miniatura, las ha sacado del contexto en las que fueron concebidas, llevándolas a otra escala, dándoles otro significado y adaptándolas a otras soluciones técnicas. De ahí surgió la serie Pequeños paisajes, piezas de 30 x 30 x 6 cm, que llevan por subtítulo Maquetas para piezas imposibles. Se trata en este caso de pequeños apuntes o bocetos que posiblemente serán el germen de obras futuras.
En la exposición también se puede contemplar la serie Paisajes fragmentados cuyo protagonista indiscutible es la luz mediante el uso de fluorescentes de colores. Se puede decir que son estructuras esculto-pictóricas realizadas con vinilos autoadhesivos sobre PVC y fluorescentes. A través de la suma de un terminaciones filo-industriales, de luz artificial y de abstracción, la artista procura recuperar sensaciones propias de una Naturaleza siempre cambiante. Se trata de un recorrido meteorológico y temporal que apela a lo que son experiencias comunes y compartidas.
Según palabras de la artista: “Mi experiencia personal me ha enseñado que las obras, o las líneas de trabajo, muchas veces surgen de forma casual e inesperada. Procuro no tirar nada”. A este respecto una simple caja de zapatos se ha convertido en un contenedor perfecto para el almacenaje de los pequeños residuos que genera su propio trabajo. Cualquier recorte de material por nimio que parezca puede ser el detonante para dar paso a una primera idea que servirá para afrontar una nueva obra. Así surge la serie Juegos cromáticos donde las pequeñas formas amorfas que consigue con el material sobrante y, que tal vez debería de haber tirado le sirven para experimentar con el volumen. Como consecuencia de ello ha elaborado unas pequeñas obras escultóricas que presenta por primera vez al público en la galería Gema Llamazares.
Arancha Goyeneche (Santander, 1967)
Licenciada en Bellas Artes (especialidad pintura) por la Universidad del País Vasco.
Desde los años noventa viene realizando una actividad artística de forma continuada destacando exposiciones individuales y colectivas en instituciones como el Palacete del Embarcadero en Santander (2016), CAB de Burgos (2012), Casyc en Santander (2010), DA2 de Salamanca(2008), Museo Barjola de Gijón (2007), MARCO de Vigo (2006), MAS de Santander (2005), Palacio de Revillagigedo de Gijón (2004), la Casa Encendida en Madrid (2003) Fundación Botín (2002)… En cuanto a galerías ha realizado numerosas exposiciones individuales en espacios como en galería Gema Llamazares (Gijón 2017), Set Spai d´Art (Valencia 2017), Siboney (Santander, 2014, 2008, 2004, 1998), Espacio Marzana (Bilbao, 2014, 2007), galería Cánem (Castellón, 2014, 2006), galería Vértice (Oviedo, 2008), galería Sicart (Barcelona, 2004), galería Max Estrella (Madrid, 2002 ), …y a ha asistido en numerosas ocasiones a ferias de arte contemporáneo como ARCO, Art Brussels, New Art, Art Frankfurt, Tránsito, Artesantander, Arte Lisboa, Espacio Atlántico, Cuarto público, Artesalamanca, Art Valencia o Estampa.
Ha recibido premios como XIII Muestra de Arte Joven, Adquisición V Certámen de Artes Plásticas Unicaja, Adquisición XV Premio L´OREAL, Mención Especial en la XV Bienal de Pintura de Zamora, Accesit III Premio Joven de Universidad Complutense de Madrid, Adquisición XI Certamen de pintura de la U.N.E.D, Mención honorífica III Premio ABC de fotografía, finalista en el premio Ciutat de Palma Antoni Gelabert de Artes Visuales, entre otros. Asimismo, ha sido becada por la Diputación Foral de Vizcaya (1991), el Gobierno de Cantabria (1992) y por la Fundación Botín (2001)
Su obra se encuentra representada en colecciones como en la Colección Norte (Gobierno de Cantabria), Fundación Botín, Colección de pintura L'ORÉAL, Unicaja, Parlamento de Cantabria, el MAS, Ministerio de Asuntos Sociales. Universidad Complutense de Madrid, Casyc, Cámara de Comercio de Santander, Junta de Castilla-La Mancha, U.N.E.D, Colección Caja Burgos, Colegio Oficial de Arquitectos de Cantabria, Cajastur, DA2 Salamanca, Colección Ernesto Ventós, Colección Los Bragales, …
Sobre su trabajo han escrito en catálogos monográficos los siguientes críticos, comisarios e historiadores de arte contemporáneo:
- La pared incorporada: Arancha Goyeneche. Xabier Sáenz de Gorbea. 1992.
- Espacios protegidos. Francisco Javier Sanmartín. 1998.
- Fuga y retorno de la pintura. Fernando Golvano. 1999.
- Entrecruzamientos. Alicia Murría. 1999.
- Pintura sin pintura. El concepto toma el mando. Javier Hernando . 2001.
- Una historia de traiciones. Yayo Aznar. 2001
- Arancha Goyeneche. Un cúter en la esfera del ojo. Mariano Navarro. 2001.
- Arancha Goyeneche en el paisaje del Bois D´Amour. Mónica Alvarez Careaga. 2001.
- Bellas ilusiones. Elena Vozmediano. 2002.
- Un concepto de pintura diferente. Fernando Zamanillo Peral. 2002.
- Hablemos de Arancha Goyeneche. Hablemos de pintura. Javier Avila. 2004.
- Cómo y de qué se supone que murió la pintura y cómo hacer para recuperarla. Miguel Cereceda. 2004.
- El orden oculto del caos o la belleza moderna. Jaume Vidal Oliveras. 2004.
- El placer abstracto. Carlos Jiménez. 2008.
- Cuando la imagen se desborda. David Barro. 2009.
- Pintura entre_ y por encima_ de los medios. F. Javier Panera. 2009.
- Arancha Goyeneche. Legitimidad de un paisaje. Javier Hontoria. 2010.
- Paisajes de esquina.Imaginando los paisajes de Arancha Goyeneche. Javier Avila. 2010.
- Sin mundo no hay paisaje. Noemí Méndez. 2016.
- Arancha Goyeneche. Sobre los (no) límites del paisaje y la pintura. Juan Francisco Rueda. 2016
Por último, cabe destacar que su obra aparece mencionada y reproducida en libros de referencia sobre la reciente pintura española, como en Juan Antonio Ramírez (ed.) El sistema del arte en España (2010), y el manual Arte español contemporáneo 1992-2013 (2013) coordinado por Rafael Doctor.