Artista nacido en Mula. Con 17 años emigró a Ceret (Francia) lugar de residencia de pintores como Picasso, Braque, Dalí y otros muchos. Desde 1977 reside en Soneja (Castellón), donde alterna el trabajo de marmolista, con su pasión artística, realizando grabados, esculturas, dibujos, e inventa una nueva técnica pictórica la “SILIPINTURA”.

Su pintura es de amplio espectro temático, pero inclina sus preferencias por el retrato, marcado siempre por la fidelidad. Es un pintor de retos, con una marcada personalidad, cuyo objetivo es el de captar la realidad, con la máxima perfección posible. Sus obras, siempre complejas, sueltas, parten de un acertado dibujo, repleto de los contrastes que las luces y sombras producen en momentos determinados.

La muestra ofrece una selección de su última obra sobre retratos híper realistas, influenciado por el dibujante brasileño Charles Laveso, quién ha conseguido que su curiosidad e inquietudes le transporte mucho más lejos que el trabajo que habitualmente venía elaborando.

El retrato es una especialidad pictórica que cultiva con gran acierto; utiliza el pastel, también el óleo, con el que apuntala los rasgos fundamentales y rinde pleitesía al parecido físico, pero también cala en la personalidad del modelo. Es un excelente dibujante y un conocedor de los secretos del color, lo que le permite cultivar los la figuración como oriente de su hacer.

Son imágenes espontáneas, con la frescura del apunte, que capta un instante real y como apunta el crítico de arte Mario Nicolás, “en ocasiones pinta frente al modelo, en otros casos reproduce grandes valores de la Historia, el cine y otros… en esta aventura de encontrar la cuadratura del círculo, sus trabajos evitan totalmente la materia, el lápiz, el carboncillo y finas minas se encargan de pausar los trabajos, complaciéndose en la matización y siempre la atmósfera, el aire, el espacio imponiendo su ley, la ley de un pintor que conoce a la perfección la técnica y el oficio pictórico”.