¡Vamos de tiendas! Memoria gráfica del comercio de Santander es una exposición fotográfica que pretende homenajear, en el recuerdo, el comercio de Santander en los años posteriores al incendio de 1941 y  la reconstrucción de la ciudad. La idea parte de recordar lo que el comercio supuso para la sociedad en aquellos tiempos. La colaboración del Centro de Documentación de la Imagen de Santander (CDIS) y su equipo, ha sido esencial para la consecución del proyecto.

El comercio en Santander siempre ha sido un espejo de vida, siempre resucitando de cenizas de pólvora, incendios, crisis… vida que fue capaz de contagiar a una ciudad porque Santander siempre ha tenido su identidad en el comercio. Con esfuerzo, con ilusión, con nombres propios, el comercio fue creciendo y tomando plazas, calles reconstruidas e incluso portales. El comercio era vida para la ciudad y el ir de tiendas, era pasear, mirar, saludar, charlar… entre amigos. Todo el mundo tenía un pariente, un compañero de algo, un amigo en alguna tienda o sencillamente conocía y por eso le gustaba que le atendiera siempre, Fulanito o Menganito.

La época de la escasez y el estraperlo fue dando paso a nuevos comercios con maravillosos escaparates donde los niños soñábamos que con solo decir “me lo pido” era nuestro. Jugueterías, las primeras tiendas de deporte, pastelerías… un universo a la vista con solo callejear. Y entrar en una tienda con tu madre era estar más derecho que una vela, ni moverte. Si te ofrecían algo, la primera vez había que decir no, la segunda mirabas con cara de pena en busca de autorización y si era afirmativa, a dar las gracias.

La exposición ¡Vamos de tiendas! nos ofrece la posibilidad de disfrutar de más de un centenar de imágenes con el comercio de Santander como único protagonista. Quiero aprovechar  para agradecer la colaboración desinteresada de todos los comercios e instituciones participantes. Os propongo este viaje al pasado y os animo a contar vuestras historias.

César Pombo