La exposición cuenta con  la participación de los siguientes artistas: Equipo Pigmento, formado por Rosa Gil y Rosa Diego (Logroño); Julia Rubio (Logroño); Sergio Ferrúa (Uruguay) y Joan Mirandes (Girona).

Sergio Ferrúa, nacido en Uruguay y residente en Valencia, es escultor. Actualmente desarrolla su trabajo en la propia naturaleza, en lugares en conexión con las plantas, árboles, animales entre el río y la orilla, el bosque y las montañas que sirvieron a la agricultura y a favor del respeto, conocimiento y preservar la naturaleza que nos sostiene.

En Santa Lucía presentó su obra ‘Labranza de los lumbrícidos’, compuesta por ocho piezas ubicadas en un circular imaginario con un diámetro de 20 metros. Hace referencia a la interacción biológica de las lombrices de tierra-lumbrícidos que se mueven en las raíces, hojarascas y los lados, produciendo moldes de energía fértil, colaborando a respirar y humedecer la tierra.

Rosa Diego y Rosa Gil, nacidas en Logroño y componentes del Equipo Pigmento, presentaron en Santa Lucía la obra ‘Donde habitan las palabras’, un proyecto basado en la convivencia y en la investigación, con los códigos propios del lugar y sus gentes. Una manifestación creativa donde se manifiesta el hecho de ser, de pertenecer, de estar… en Santa Lucía.

Julia Rubio utiliza el barro y la cerámica como recursos para expresas ideas, conceptos y proyectos artísticos. Innova e investiga con nuevos materiales, como el hierro, las fibras vegetales, la madera, que incorpora y hace que se integren a las piezas formando una unidad. Los tornillos, los tapices, los escriños son sus otros elementos, sus otros recursos tan significativos para ella como el barro y la cerámica.

Presentó en Santa Lucía su proyecto ‘Entre la tierra y el cielo’, la tierra generadora de vida, de uso y de recurso.

Joan Mirandes se ha dedicado principalmente a la restauración de muebles y lo combina con la realización de esculturas conjuntamente con el desarrollo del término de selvicultura, buscando una verdadera cultura del bosque. Llevó a la muestra el proyecto ‘El bosque que vuela. De Rocaborca a Santa Lucía’, esculturas hechas en Rocacorba, con la mayoría de materiales de los bosques de allí y salen al encuentro de lo global que se concreta en otros bosques y situaciones planteándose la posibilidad de diálogo con los bosques de Santa Lucía.