"Como una lágrima en el fondo de una pupila morena que brilla como un puñal" (Ángel de Molina).
El motor de su trabajo está inspirado en procesos vivenciales que atraviesan plasmandolos en experiencias singulares y colectivas en el medio de la fotografía, jugando con diferentes identidades transgresoras de femiinidad, conceptos en torno a su sexualidad, lenguaje y vivencias. La búsqueda pública se basa en la intimidad y el placer de un ritual de creación para llevar a cabo procesos de cambio, auto-empoderamiento, y así poder explorar y recrear su visión del mundo.