Fernando Barreira es un artista de vocación comprometido con su obra desde su primera exposición con 16 años. Comienza así, una larga trayectoria profesional en la que es imposible discernir el Fernando persona con el Barreira artista. Su vida es su obra y su obra es su vida. Asi lo pudimos descubrir en la esplendida exposición que con motivo de sus treinta años de profesión se presentó en el año 2010 en el Museo de Ourense, un repaso a toda su trayectoria volcada en el diseño, pintura y escultura. Por su cincuenta cumpleaños nos sumergió a través de su arte en su universo más personal en: La infame infancia en la galería Ministerio de Asuntos importantes en Madrid. Fue esta una importante e interesante exposición tanto desde el punto de vista artístico como desde la óptica personal, 50 años expresados plásticamente : los inicios escolares en la Galicia de los 70, su periplo artístico en Madrid, Mallorca, Porto y todo un recorrido emocional en los que los vicios y virtudes aparecen representados según el autor los ha sufrido y vivido.

Barreira es por tanto, un artista de emociones, barroco, pasional que vive su obra como vive su vida, con emoción, pasión, y sentimientos excesivos que le permiten, gracias a su habilidad plástica, trasladarlos a su obra con una intensidad que traspasa la propia obra y consigue una de las finalidades de cualquier expresión artística: comunicar sentimientos. Es esa extremada sensibilidad la que le ha llevado recientemente a donar una serie limitada de serigrafias de su obra: “ O soñador de tempos” en la que quedaba reflejada la evolución de los acontecimientos en torno al Castillo de Monterrey de su Verin natal, relacionados con la posibilidad de que se convirtiera en Parador.

Su experiencia realizando colecciones de diseño, de autor, de marca, la traslada a sus catálogos y publicaciones, ya que en sus trabajos y presentaciones participa en todas las fases del proyecto, como en el diseño del libreto de Sergei Prokofiev: Opera del amor de las tres naranjas o el reciente y exitoso cartel del carnaval de Malaga del año 2014.

Gran trabajador del arte, es la escultura otra de sus importantes vertientes artísticas. Una vertiente, que le permite investigar con distintos soportes y técnicas, con los que crea y recrea personajes Baconianos y Velazqueños, dos de sus más importantes fuentes de inspiración. Es en esta fáceta, la escultórica, donde encontramos representaciones que de una forma casi obsesiva trabaja a lo largo de todas su trayectoría: Maribarbola, El niño de la silla, la noche, Matavacas. Todos ellos con rostros en los que los rasgos aparecen desdibujados, un interesante factor en común de su escultura que no de su pintura, donde aparecen perfectamente reconocibles las Malaguetas o las Remendadas de Arzúa, creaciones recientes de este versátil artista.

Barreira es por tanto, un artista no por elección, sino por vocación y autentica necesidad vital, ya que es en el Arte donde encuentra su mejor via de comunicación y expresión. Es con el Arte como nos hace participes de su universo más personal, a partir de cualquier manifestación artistica que domina a la perfección desde el punto de vista técnico, respaldado por una sólida formación multidisciplinar y que culmina con un estilo propio e intransferible.