Un viaje a Laponia para fotografiar la aurora boreal que no transcurrió como esperaban, se convirtió en el punto de partida de esta colección de imágenes realizadas por la fotoperiodista Kris Ubach y el fotógrafo Roberto Iván Cano. Las duras condiciones atmosféricas, la falta de práctica sobre el terreno y un poco de mala suerte, hicieron que aquel encargo se convirtiera en una inesperada aventura. Una experiencia que les hizo pensar mucho acerca de las difíciles situaciones a las que a veces se enfrenta un fotógrafo y en aquellas historias que se esconden detrás de cada imagen.
Lo que vas a ver en esta exposición es fruto de aquél y múltiples viajes posteriores por lugares remotos, inaccesibles y extremos, de los que no sólo nos trajeron estas bellas imágenes sino también valiosos consejos y trucos para lograrlas. Cada imagen es un ejemplo de fotografía en alguna condición extrema: frío, humedad, aridez, oscuridad… Un conjunto que resume siete años de fotografías recogidas en libro Fotografía de aventura y en condiciones extremas (Anaya Multimedia).
Durante esos años, los autores han accedido a lugares remotos (paisajes vírgenes en Antártida, Groenlandia, las islas Svalbard e Islandia, entre otros), a ciertos parajes a los que resulta mucho más difícil llegar que ser fotografiados. Según Kris Ubach, “hay fotos que, aunque parezca mentira, llegas y las haces porque se dan unas condiciones de luz excepcionales y el lugar es en sí maravilloso. En esos casos la casualidad te brinda las imágenes y tú tienes que ser lo suficientemente rápido para captar el momento”. Sin embargo, “la mayoría de las fotografías de esta exposición llevan muchísimo trabajo, los viajes son preparados a conciencia, hay que saber previamente cuándo sale o se pone el sol en los sitios a los que vas, qué momento del año es bueno para según qué fauna, o qué condiciones climatológicas son las más adecuadas para cada tema”.