Joana Santamans (Barcelona, 1977) llega a Agramunt con su ejército de animales. Son bichos
con aires cosmopolitas, pero impregnados de su medio rural. Podríamos decir que estas
bestias son como su creadora: proceden de la naturaleza, pero conectan con el ritmo urbano,
lo que provoca una simbiosis equilibrada.

Joana ha transitado por Els Hostalets de Pierola y Esparreguera, villas salpicadas por Montserrat;
también por Londres y Nueva York, urbes gigantescas, y ha instalado su estudio en Barcelona.
Se trata de pueblos y ciudades con sus ritmos, que han influido en su estilo. Es una artista
multidisciplinar; la cerámica, muebles encontrados por la calle, papel y muros son soportes
bienvenidos para plasmar su arte. En esta exposición la madera es el material elegido. Un
conejo, una vaca, un cisne o un gallo son algunos de los protagonistas que muestran en primer
plano su perfil bueno mientras observan al espectador.

La artista siempre se acompaña de música, elemento inspirador que invita a hacer jugar los
pinceles llenos de pintura al óleo con las aguas propias de la madera. Estas formas sinuosas
del material son uno de los rasgos destacables en su estilo: el trazo baila con el soporte, pero
a la vez las líneas de sus ilustraciones son seguras y netas, herencia de su formación en
diseño gráfico.

Como ella misma dice, su obra se puede definir como naturalista, esperanzadora, minuciosa,
directa e inquietante. La inquietud la convierte en exploradora, y con este talante vino a
Agramunt, donde enseguida conectó con Guinovart: el mismo vínculo con la naturaleza, un
entorno lleno de estímulos y matices, animales salvajes y de corral que interactúan con nuestro
animal interior, quizás doméstico, quizás salvaje.

Así pues, presentamos esta exposición de Joana Santamans y su tribu de animales.

Lara Vidal Santorum
Historiadora de l’art